El público la esperaba y ella no decepcionó. La actriz francesa Catherine Deneuve tuvo este sábado en el Festival de Cannes su gran regreso público un año después de haber sufrido un ictus por el que tuvo que ser hospitalizada.
La intérprete, de 77 años, recorrió la alfombra roja como protagonista de «De son vivant», un drama de la francesa Emmanuelle Bercot que se estrena fuera de competición y cuyo rodaje tuvo que ser interrumpido durante meses debido a ese incidente.