Las operaciones de compraventa en el negocio hotelero español han sido recurrentes tras la pandemia. El último en salir al mercado ha sido el Hotel Monegal de Barcelona, ubicado entre las Ramblas y Plaza Cataluña, uno de los emplazamientos más turísticos de toda la ciudad. El precio de salida de este establecimiento, descrito por muchos profesionales del sector como un “bombón del negocio hotelero”, es de 29,5 millones de euros.
El edificio, ubicado en el número 62 de calle Pelayo, pertenece a un grupo de inversores catalanes, que lo han puesto al mercado a través de varios intermediarios. Han sido muchas las consultoras que han tanteado la venta del establecimiento ‘off market’ en los últimos años, si bien ahora ya está en el mercado de manera oficial.
El activo cuenta con 53 habitaciones, con una rentabilidad neta del 6% sobre el precio venta. Adicionalmente la construcción cuenta con una superficie destinada a oficinas, de más 800 m2 en planta principal y primera, que actualmente vacías.
“Existe un proyecto de mejora tanto del hotel como de la zona de oficinas a disposición del comprador, que permite incluso la redistribución de las habitaciones del hotel y obtener un ascenso en su categoría con licencia ya concedida a hotel de 5 estrellas y un incremento importante de sus resultados económicos”, dicen desde la compañía.
Gracias a este proyecto, con una inversión aproximada de 4 millones de euros, según explican fuentes cercanas al hotel, “se conseguiría subir de categoría y elevar el precio promedio por noche, consiguiendo aumentar la rentabilidad neta de la inversión al menos hasta el 10%”.
El Hotel Monegal se encuentra a siete minutos a pie de la catedral gótica de Barcelona y del Palau de la Música. La Pedrera y la casa Batlló de Gaudí están a menos de 15 minutos a pie y a 200 metros del hotel, al otro lado de la plaza Cataluña, se encuentra la parada de autobús con servicio de ida y vuelta directo al aeropuerto.
Negocio hotelero español, un caramelo para el inversor
Algunas de las cadenas hoteleras más importantes, como Meliá o NH, ya han tenido que vender activos ante la falta de ingresos, y los expertos esperan que estos inversores extranjeros concentren su interés en grandes ciudades como Madrid y Barcelona, junto a los destinos turísticos de Baleares, Canarias y la Costa del Sol.
Casi un año y medio después del estallido de la pandemia del coronavirus en España, el sector hotelero nacional anda revolucionado, tratando de sortear la crisis de la mejor manera posible. Pese a los buenos datos de turismo nacional durante la temporada alta de verano, el importante peso de los turistas extranjeros está muy lejos de los récords alcanzados en los años previos a una fecha que quedará señalada para siempre: marzo de 2020.
Grandes y pequeñas cadenas hoteleras en todas partes del mapa nacional sufren las consecuencias de las restricciones de movilidad y condiciones a cumplir para viajar y regresar al lugar de origen de los extranjeros, aunque los vacunados prácticamente pueden viajar sin restricciones.
Esa caída de la demanda para los establecimientos hoteleros ha hecho mella en sus ingresos y muchos han tenido que acudir a la venta de los inmuebles para encontrar liquidez. Las operaciones se caracterizan, por un lado, por un cambio de operador, o por la revalorización del activo para una futura venta, y por otro lado, el cierre de operaciones ‘sale & leaseback’, donde el vendedor mantiene el negocio mediante un alquiler del edificio durante unos años.
Algunas de las operaciones más destacadas de los últimos meses han sido la venta de ocho establecimientos de Meliá a un vehículo institucional por 200 millones de euros. A su vez, la hotelera dirigida por Gabriel Escarrer adquirió al fondo Varde el hotel Apolo de Barcelona por 90 millones. Mientras, NH ha vendido el hotel Calderón de Barcelona por 125 millones de euros.
Entre las operaciones más grandes, que incluían varios activos en diversos destinos nacionales, están la compra de RIU de 19 hoteles a la operadora TUI por 670 millones, o la adquisición de cinco hoteles por parte del fondo canadiense Brookfield por 550 millones.
Los expertos en el sector hotelero y de Hospitality afirman que las operaciones de compraventa de inmuebles aún tienen recorrido en nuestro país, marcado además por el incremento de las oportunidades de inversión en España frente a otros países.