Leonardo DiCaprio, que cumple 48 años, no solo es uno de los actores más reconocidos de Hollywood, también es un hombre de negocios al que le gusta impreganar sus inversiones con su compromiso con el medio ambiente y la justicia social. Este afán es el que le ha llevado a Trujillo, la localidad cacereña conocida por ser uno de los escenarios de Juego de Tronos y La casa del dragón, también albergará una fábrica de diamante sintéticos con la que Leo tiene mucho que ver.
Diamond Foundry es una empresa de Sillicon Valley que produce diamantes de forma artificial y entre sus inversores figura la superestrella de Hollywood. Será en el bello pueblo de Trujillo donde en febrero de 2023 comenzaran a construir una fábrica de diamantes, atraídos por el sol y la tecnología fotovoltaica.
Fue durante el rodaje de su película Diamante de sangre en 2006 cuando DiCaprio comenzó a interesarse por estas piedras preciosas y una década después decidió invertir en su creación. Es sabido que la naturaleza tarda varios miles de años en generar un diamante, uno de los minerales preciosos más valorados por su uso en joyería y también muy útil para la industria por sus propiedades. Y es por ello que empresas tecnológicas como la fundada en Silicon Valley hayan logrado cultivarlos con reactores de plasma que reproducen las condiciones de presión y calor necesarias para su creación solamente en un plazo de entre seis y diez semanas.
.La disponibilidad de energía solar es muy alta en Extremadura y el objetivo de esta empresa es que la fundición se alimente con energías renovables, tal y como declaró Martin Roscheisen, cofundador y director ejecutivo de Diamond Foundry, al diario El País. DiCaprio es un importante activista en favor del medio ambiente. Lleva colaborando con esta empresa desde 2015 y está «orgulloso de invertir en Diamond Foundry, una empresa que reduce los costes humanos y medioambientales mediante el cultivo de diamantes sostenibles».
Fue en junio del año pasado cuando se firmó el acuerdo entre Industria y la Junta de Extremadura con esta empresa estadounidense con el que se emplearán de manera directa a alrededor de 300 extremeños. Guillermo Fernández Vara, presidente de la Junta de Extremadura, aseguró que»la región extremeña es el mejor lugar del mundo para poder llevar a cabo este proyecto» y puso en valor sus recursos naturales, fundamentales para poner en marcha esta novedosa iniciativa.
En el polígono industrial Arroyo Caballo de Trujillo, se levantará la factoría de alrededor de 30.000 metros cuadrados de Diamond Foundry si los planes salen según lo previsto, además de desarrollar una planta solar de 120 megavatios que requeriría de un terreno de unas dimensiones cercanas a las 200 hectáreas y la infraestructura de almacenamiento, con una potencia de otros 60 megavatios, cuya ubicación concreta aún está por determinar. Cuando presentaron el plan del proyecto en junio y se firmó el acuerdo entre Industria, la Junta de Extremadura y la empresa estadounidense, los promotores señalaron que se crearían 300 empleos directos, pero se estima que a pleno rendimiento la fábrica llegaría a dar empleo a 650 trabajadores, una elevada cifra teniendo en cuenta que Trujillo cuenta con 10.000 habitantes. La empresa espera poder comenzar con el proyecto en el año 2024.
