La pandemia provocada por el covid-19 hizo estragos en el mercado hotelero español. Muchos establecimientos cerraron temporalmente, pero otros quedaron en una situación precaria que llevó a que los propietarios los tuvieran que vender. Es el caso del Hostal Corona, situado en el barrio de El Terreno, un establecimiento emblemático en esta zona de Mallorca. Estuvo cerrado desde marzo de 2020 y posteriormente su por aquel entonces dueño, Tòfol Navarro, se lo vendió en 2021 a un grupo inversor sueco por 5 millones de euros.
En la actualidad, el inmueble vuelve a salir al mercado por 5 millones. El grupo de inversores suecos pretendían relanzar este hostal y convertirlo en hotel boutique y restaurante. Pero han decidido ponerlo de nuevo a la venta.
Este establecimiento data de 1930 y lo diseñó el arquitecto mallorquín Gaspar Bennàzar. Fue reformado en 1987 y convertido en hostal y restaurante. Cuenta con 14 habitaciones, diferentes terrazas, poerches y varios salones. Adyacente al inmueble hay un estacionamiento para 10 coches.
El Terreno, un barrio de Palma que está viviendo una segunda juventud
Este histórico barrio de Palma de Mallorca está viviendo una nueva juventud, gracias a la inversión extranjera destinada a comprar edificios que permanecían cerrados y abandonados para impulsar nuevas viviendas y locales de lujo.
Actualmente se ha puesto en marcha el proyecto Gomila, un proyecto arquitectónico que consta de siete edificios que albergarán 60 viviendas de alquiler.
En 1777 llegó el primer vecino al barrio. Fue el pintor, dibujante y naturalista de la Casa Real Cristóbal Vilella. Le siguieron burgueses e indianos, que construyeron villas de veraneo y casas de arquitectura colonial con grandes jardines y árboles exóticos. A finales del siglo XIX, la familia Gomila, llegada de las Antillas, construyó una casa en El Terreno y cedió la parte delantera al Ayuntamiento, para que los niños del barrio pudieran jugar. La llamaban «sa Plaçeta». Hoy, es la Plaza Gomila. En 1910 se inauguró el primer hotel del barrio, el mítico Reina Victoria, seguido en 1923 por el Hotel Mediterráneo. El Terreno se convirtió en una zona de turistas y vecinos selectos, hoteles icónicos y libertad.
Entre los años 50 y 70, El Terreno fue el escenario del esplendor de una Europa despreocupada que volvía a disfrutar y a divertirse. Un lugar de culto por el que pasaron multitud de artistas, intelectuales y bohemios atraídos por la moderna diversión cosmopolita que se vivía en sus bares y salas de fiesta. El Patio, Tito’s, Barbarela, el bar Mónaco, los descapotables, los dry martinis, el Sgt. Pepper’s, las camisas de seda, las botas altas, Ava Gardner o Errol Flynn. El bar Chotis, la barra del Joe’s, Robert Graves, Aristóteles Onassis, Marlene Dietrich, los encuentros de Camilo José Cela, el concierto de Jimmy Hendrix, el de Wilson Picket, el de Ray Charles o el de los B. B. King.