Es francés, hijo de emigrante andaluz y supo que quería ser cocinero desde muy niño. Guillaume Gómez tiene sólo 42 años y una larga carrera como chef, gran parte de la cual ha desarrollado en el Palacio del Elíseo, donde ha dado de comer a cuatro presidentes y desde donde ahora ejerce de embajador de la gastronomía gala.
Gómez ha sido uno de los invitados este lunes en la primera jornada de ponencias de San Sebastián Gastronomika, donde ha hecho gala de su condición diplomática y no ha desvelado ningún secreto de los mandatarios a los que ha servido en los últimos 20 años: Jacques Chirac, François Hollande, Nicolas Sarkozy y Emmanuel Macron.