Parar, desconectar y reconectar con las personas y el entorno que nos rodea. Ese es uno de los grandes retos a los que se enfrentan los habitantes de ciudades de todo el planeta, que en su modo de vida rápido, en ocasiones, ha dejado de lado algo tan importante para la salud mental y el bienestar emocional. Un estudio, publicado hace ya algunos años, llegó a esta conclusión: «el riesgo de padecer ansiedad es un 21% mayor para quienes viven en ciudades, que también tienen un aumento del 39% en la incidencia de trastornos del ánimo”. Por eso, es importante que las ciudades sean capaces de ofrecer espacios que ayuden a quienes vivan a desacelerar el vertiginoso ritmo de vida al que las grandes urbes obligan.
Y eso es, precisamente, lo que pretende lograr con este proyecto el estudio Snøhetta, que regresa a Hong Kong con su diseño de granja urbana que trae espacios verdes al corazón de la bulliciosa ciudad.
Concebido para el desarrollo residencial The Pavilia Farm en Tai Wai, el proyecto consta de tres casas club que fomentan la interacción social, dando forma a un espacio de reunión donde los residentes pueden compartir experiencias, sumergirse en la calma y disfrutar de la agricultura urbana en un jardín compartido. Este pulmón verde, con un total de 26.000 m2, en medio de la densamente poblada ciudad acerca a las personas y a la naturaleza, invitándolas a dejar atrás por un tiempo el entorno urbano que las rodea y entregarse a los efectos positivos de la agricultura.
Tratando de conectar con el bonito paisaje de montañas y el río Shing Mun, que se encuentran en las inmediaciones del lugar, Snøhetta diseñó tres estructuras pequeñas «para convertirse en santuarios de calma y simplicidad en el corazón del bullicioso Hong Kong, estrechamente integrado con la naturaleza, y como espacios que brindarán alegría y mejorarían la calidad de vida de los residentes de The Pavilia Farm”, tal y como explican en su página web.
De las tres estructuras planeadas, dos de ellas, The Tea House y Farm House, ya están disponibles, mientras que se espera que la tercera, The Sky House lo esté a finales de 2023. Cada una de ellas tiene diferentes propósitos para la comunidad local. Sin embargo, en todos ellos subyace la misma filosofía de agregar toques verdes al futuro urbano y crear recuerdos compartidos.
“The Tea House está diseñado como un punto de llegada y como una experiencia de ascensión: dejar atrás la bulliciosa y acelerada ciudad y ascender a la calma”, señalan. Y aquí, el agua juega un papel fundamental, con una piscina cubierta a un lado y una cascada al otro hacen eco del sonido continuo del agua que cae, “fomentando una armonía relajante que calma la mente y ralentiza el ritmo”.
A diferencia del estado de ánimo meditativo de la anterior, The Farm House toma forma como un centro de reunión, que lleva la granja dentro de la casa y reúne a los visitantes. Rodeado por la granja urbana y sus productos, se convierte en la pieza central de Pavilia Farm. El sistema de mesas con rieles invita a la comunidad a reunirse bajo el mismo techo y permanecer alrededor de la misma mesa. Inspirada en una mesa de comedor convencional en una casa, esta mesa es «el punto central para conversaciones, risas y pasar tiempo juntos«. Aquí los residentes pueden preparar y comer los alimentos que han recolectado, mientras fluyen las conversaciones y se comparten experiencias.
