Con poco más de 1,5 metros de ancho y 7,5 de largo, esta singular propiedad situada en Shepherd’s Bush, al oeste de Londres, es oficialmente la vivienda más estrecha en venta de la capital londinense. Esta antigua sombrerería convertida en minicasa ha atraído a actores, ejecutivos, artistas bohemios y abogados por su peculiaridad, y ahora sale al mercado por 995.000 libras, poco más de un millón de euros al cambio actual.
Su último propietario, un abogado que se muda al extranjero, la adquirió hace una década por prácticamente la mitdad, unas 595.000 libras. Aunque tras una profunda reforma ha conseguir mejorar la sensación de claustrofobia de una vivienda tan estrecha en sus cuatro plantas.
Prácticamente cada estancia se sitúa en uno de los pisos. La planta baja cuenta con los espacios más amplios del edificio con más de 2,5 metros de ancho, donde se encuentran el comedor que da a un patio y jardín.
El primer piso cuenta con una terraza, y está conectado con la planta baja por una escalera de caracol, donde hay dos dormitorios. En el segundo piso, hay un cuarto de ducha, un baño y un vestidor. Un dormitorio más se encuentra en el tercer piso y tiene una cama incorporada.