¿Se acabaron los hoteles? Probablemente no, pero la nueva serie de Netflix The World’s Most Amazing Vacation Rentals (“Los alquileres vacacionales más increíbles del mundo”) defiende la opción y los beneficios de alojarse en casas privadas, como las que ofrecen plataformas como Airbnb. En parte documental sobre diseño de viviendas y en parte diario de viaje, la serie de ocho episodios sigue a tres presentadores que se alojan en un total de 24 viviendas en todo el mundo, cada una con algo diferente que ofrecer.
Para los amantes de la arquitectura es una verdadera delicia disfrutar de este tipo de edificios impactantes. Y, sobre todo, como una imagen vale más que mil palabras, poder viajar y ver todas esas casas desde la pantalla de la televisión es un auténtico lujo.
Este tipo de alquileres vacacionales singulares está cada vez más de moda y más potenciado por las plataformas de alquiler. Airbnb, por ejemplo, anunció el pasado verano la creación de un fondo dotado de 9,49 millones de euros destinado a que 100 personas realicen proyectos para construir «alojamientos singulares», que se dirige a diseñadores, arquitectos y artesanos de todo el mundo, ya sean profesionales o para desarrollar su primer proyecto, que recibirán hasta 95.000 euros para construir espacios «verdaderamente únicos».
Viajar desde el sofá
Desde dormir en una cueva a dormir en una isla privada de lujo en las Bahamas, pasando por una casa del árbol en un bosque de bambú en EEUU. Casas con mucha personalidad, muy diferentes… Pero con un denominador común. Son increíbles.
Esta primera temporada del famoso ‘reality’ cuenta con 8 episodios de aproximadamente 35 minutos cada uno. Suficiente para viajar desde el sofá a 24 alquileres vacacionales en todo el mundo.
Algunos de los paisajes o lugares visitados son México, Miami, Alaska, Bali y Japón. En cada episodio, el presentador se encarga de encontrar un lugar que sirva a un propósito específico. Los encargados de pilotar el programa son Luis Ortiz, exagente inmobiliario de Million Dollar Listing y encargado de reservar propiedades de lujo; la diseñadora de interiores Megan Batoon, que encuentra alquileres económicos con diseño; y la ‘influencer’ de viajes Jo Franco, que nos lleva a lugares fuera de lo común, como un edificio en Ciudad de México que tiene la forma del dios azteca Quetzalcoatl, construido por el arquitecto Javier Senosiain.
¿No suena genial? ¡Pues vamos a ver algunos de estos lugares que te dejarán con la abierta y con ganas de hacer las maletas.
En esta maravillosa casa de Bali, el grupo celebró el Día de Galungan con su anfitrión de Airbnb. Se trata de la Camaya Bali Butterfly.
Incluida en el primer episodio como un destino único, la casa de mariposas está ubicada en Selat, (Bali, Indonesia), y es la última que se ha sumado la colección de singulares casas de bambú en las recluidas terrazas de arroz al este de Bali. Un lugar alejado de las multitudes, la casa posee vistas de ensueño y una atmósfera propicia para conectar profundamente con la madre tierra.
Perfecta para los viajeros y amantes de la naturaleza, esta casa de dos pisos cuenta con dos dormitorios, ambos con vistas a las terrazas de arroz, una ducha compartida a cielo abierto y una pequeña sala de estar que conecta los dos dormitorios.
Camaya Bali Butterfly es considerada una de las estancias más visual y estéticamente impresionantes del programa, ya que, desde sus acres de vegetación y baños de pétalos de flores hasta su arquitectura de bambú, este destino ofrece todo lo que un viajero obsesionado con los paisajes y el diseño sueña experimentar.
Esta estancia es una de las gemas ocultas del catálogo de Airbnb. También en Bali (Indonesia), el Bamboo Birdsnest se accede mediante una empinada escalera. Después de ascender 5 metros, encontrarás una canasta tejida con una cama acogedora, la cual ofrece una vista panorámica en todas las direcciones.
Si alguna vez te has preguntado cómo sería dormir dentro de un nido de pájaros, este lugar podría acercarte a la experiencia. Además, combina el estilo de las literas o cápsulas para dormir japonesas que se acoplan con la atmósfera de la isla.
Un lugar creado en armonía con la naturaleza, ideal para las personas cuyos hobbies incluyen las actividades al aire libre, como el senderismo, surf y el camping. Para visitarlo deberás adentrarte al corazón de los campos de arroz por un camino aislado a pocos minutos del centro de Ubud.
En medio del desierto del Colorado, en Joshua Tree (California, EEUU), encontramos esta inusual construcción que se asemeja a un platillo volante. En realidad, es una Futuro House restaurada que se comercializa como un hotel a través de Airbnb.
Las Futuro House fueron concebidas por el arquitecto finlandés Matti Suuronen en 1968. La intención fue crear una casa de vacaciones prefabricada para instalar en escenarios adversos.
Por fuera, esta cápsula ovalada cuenta con pequeñas ventanillas y una escalera retráctil, y en su interior dispone de todas las comodidades. La unidad es alimentada completamente por energía solar. Alojarse en ella cuesta a partir de 267 dólares la noche a través de Airbnb.
En la ciudad de Atlanta (Georgia, EEUU) se esconde un bosque de bambú de 80 años. Este histórico espacio natural alberga entre sus árboles una singular casa del árbol que se encuentra a más de cuatro metros del suelo.
Esta residencia, al igual que el bosque, es un santuario repleto de historias, porque fue construida con antigüedades arquitectónicas recuperadas, como vitrales de principio de siglo, restos de una iglesia de 1955 y puertas francesas de la época victoriana.
Además de brindar a sus visitantes un viaje al pasado, tendrán la oportunidad de compartir el espacio con unos divertidos compañeros: hermosas alpacas bolivianas y cinco amigables llamas que son Dali, Figgy, Campari, Sophie y la llama bebé Llyra.
Esta casa en el árbol fue construida en su totalidad por la anfitriona del lugar, Kara, quien también se encargó de edificar el santuario de alpacas y llamas.