Portugal es una tierra de contrastes que sorprende a propios y extraños. Cada rincón de este país ofrece un escenario único que merece ser contemplado, algo que mejora notablemente cuando se mira desde las alturas. En este artículo recopilamos una selección de los miradores con las mejores vistas de Portugal.
Boca do Inferno en Cascais
Comenzamos nuestro viaje en la costa oeste de Portugal, en Cascais, una encantadora ciudad costera conocida por su belleza natural y sus playas paradisíacas. Allí está el mirador de Boca do Inferno, célebre por ofrecer unas vistas impresionantes del mar golpeando con fuerza las rocas.
La característica más destacada de Boca do Inferno es la formación geológica de los acantilados rocosos que se alzan sobre el Atlántico. Estos acantilados forman una costa abrupta y accidentada, creando un telón de fondo impresionante contra el mar.
Sin embargo, la verdadera maravilla de Boca do Inferno se manifiesta al atardecer. Cuando el sol se desliza lentamente hacia el horizonte, pinta el cielo con una paleta de colores cálidos y dorados. Los tonos naranjas, rojos y morados se reflejan en las aguas del mar, fraguando una vista que es, simple y llanamente, espectacular. Es en este momento mágico cuando los visitantes se reúnen en el mirador para capturar la belleza de la naturaleza en su máxima expresión.
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Mirador de la Fraga, Caminha
El mirador de Fraga se encuentra en el municipio de Caminha, en el norte de Portugal. Está situado en la cima de una colina que domina la desembocadura del río Miño y la ciudad.
Desde el mirador se obtienen unas vistas panorámicas de la ciudad, el río, la costa y el Monte de Santa Tecla, en España. En un día despejado, hasta se pueden ver las islas Cíes, en Galicia. Cuenta con una ruta de senderismo que comienza en el mirador y llega hasta la Torre do Relógio, en el centro de Caminha.
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Mirador de Santa Lucía en Lisboa
El mirador de Santa Lucía está situado en el barrio de Alfama, en Lisboa. El mirador ofrece unas vistas panorámicas de Alfama, el Tajo, el centro histórico de Lisboa y la ciudad de Almada, en el otro lado del río. En un día despejado, se pueden ver las montañas de Sintra y la costa de Cascais.
El mirador se caracteriza por su terraza elevada, dotada de bancos de piedra, desde donde se puede apreciar una perspectiva panorámica de la ciudad que incluye vistas al Puente 25 de Abril, el Puente Vasco da Gama y el distrito de Belém. Es un enclave perfecto para quienes buscan un momento de tranquilidad y contemplación de la belleza lisboeta.
Este mirador fue construido en el siglo XIX sobre los cimientos de una antigua capilla consagrada a Santa Lucía. Asimismo, la terraza del mirador se halla decorada con azulejos que, al igual que la iglesia cercana, muestran escenas de la vida de la santa
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El Mirador do Cervo
Otra de las mejores vistas de Portugal la encontramos en el Mirador do Cervo, situado en la cima del Monte do Crasto, en la Serra da Gávea y en el municipio de Vila Nova de Cerveira. Está a una altura de 300 metros sobre el nivel del mar y ofrece unas vistas espectaculares de la ciudad de Vila Nova de Cerveira, el río Miño y la frontera con Galicia.
El mirador está coronado por una escultura de un ciervo, obra de José Rodrigues. Inaugurada en 1985, es un símbolo del municipio de Vila Nova de Cerveira y tiene una mágica leyenda local. Según el mito, una vez hubo un ciervo valiente y noble que lideraba a su manada en la lucha contra los cazadores. Un día, el animal fue herido y, antes de morir, subió a la cima del Monte do Crasto para contemplar las vistas de su tierra natal. Desde entonces, el ciervo ha sido considerado un símbolo de libertad y resistencia.
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Mirador Puerta del Espíritu Santo, Vila Nova de Cerveira
Muy cerca del mirador anterior se pueden encontrar otras de las mejores vistas de Portugal. El mirador Porta do Espírito Santo, en el Monte do Castelo, también en el municipio de Vila Nova de Cerveira, está a una altura de 225 metros sobre el nivel del mar y ofrece unas vistas panorámicas espectaculares de la ciudad de Vila Nova de Cerveira, el río Miño y la frontera con Galicia.
El mirador está coronado por las ruinas de una capilla del siglo XVIII, que nunca fue terminada. La capilla está dedicada al Espíritu Santo y, según la tradición, fue construida por un pastor que fue salvado de una tormenta por esta entidad supraterrenal.
El Mirador de Picote
Otra de las mejores vistas de Portugal la encontramos en el Mirador de Picote, también conocido como Mirador de la Peña del Puio. Situado en el municipio de Picote, en el distrito de Braganza, se halla en la cima de una colina que domina el río Duero, su cañón y la Serra do Alvão.
Las vistas del mirador son tan increíbles que han sido declaradas Monumento Natural. En un día despejado, desde ahí, se pueden ver las montañas de León y la ciudad de Miranda de Duero. Uno de sus reclamos turísticos es la pasarela acristalada que sobresale del borde de la colina, lo que permite a los visitantes disfrutar de unas de las mejores vistas de Portugal.
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