La llegada de la primavera marca también el inicio de la temporada preferida para iniciar obras de reforma en casa. Y tiene su explicación: por un lado, que los días se alargan y eso facilita la realización de trabajos en exteriores; por otro, que las temperaturas suben y los materiales secan antes; y, además, no hay problema en dejar las ventanas abiertas para ventilar y evitar así olores.
Y todo ello con una ventaja añadida, que cuando lleguen el verano y las vacaciones podremos irnos con la tranquilidad de tener las reformas terminadas. ¿Pero qué reformas se pueden hacer con el cambio de estación? Realmente cualquiera, pero hay algunas ideas especialmente atractivas que nos traen los expertos de Habitissimo.
Mejorar el aislamiento
Si hemos comprobado durante el invierno que nuestra casa pierde mucho calor, es momento de abordar el problema. Aunque puede parecer una inversión importante, hay que tener en cuenta que la factura en climatización se reducirá de manera significativa, hasta en un 50 %. Y lo mejor es que cabe la posibilidad de solicitar ayudas públicas para ello.
¿Qué reformas mejoran el aislamiento de la vivienda? Inyectar materiales aislantes en las paredes exteriores es un trabajo que se realiza en apenas una jornada y sin necesidad de hacer obras. Y, si las ventanas tienen ya unos años, es buena idea cambiarlas por otras más eficientes.
Instalar aire acondicionado
Aún queda tiempo para que llegue el calor asfixiante del verano, pero no hay mejor momento que el inicio de la primavera para plantearse la instalación de aire acondicionado. ¿La razón? Que la demanda de equipos y de profesionales se dispara coincidiendo con la subida de las temperaturas. Si se deja para más adelante, es posible que haya que esperar incluso semanas para poder disfrutar del aire acondicionado.
Renovar el baño o la cocina
Ambas son estancias húmedas y sufren especialmente por ello en invierno. Si han aparecido humedades, moho o filtraciones, conviene no dejar pasar el tiempo y poner solución cuanto antes. En el caso de cambiar los revestimientos, todo secará mucho más rápido, de modo que la incomodidad por no disponer de baño o de cocina se reduce al mínimo.
Tanto en las reformas de baños como de cocinas hay que tener en cuenta otro aspecto importante: si se van a cambiar los revestimientos, merece la pena gastar un poco más para renovar la fontanería, sobre todo si tiene ya algunos años. Es la mejor manera de prevenir averías que obliguen a abrir esas paredes o suelos recién estrenados. Siempre puedes consultar cuánto cuesta reformar un baño.
Pintar paredes interiores y fachadas
Las pinturas actuales no desprenden olores fuertes, pero siempre conviene ventilar la casa. Las temperaturas suaves de la primavera lo permiten, además de que al abrir las ventanas secan mucho más rápido. En el caso de las fachadas, la temperatura es también importante porque con un calor excesivo las pinturas pueden secar demasiado rápido y agrietarse.
Preparar los espacios exteriores
Terrazas, porches o jardines son los grandes olvidados durante el invierno. Así que cuando la estación acaba es momento de darles un repaso, de esta forma estarán perfectamente listos para usar cuando los días lo permitan. Pintar paredes y barandillas, cambiar el suelo si está deteriorado, poner nueva iluminación o renovar ese césped que se ha estropeado son algunas ideas.
Y si tenemos en mente hacer realidad ese sueño de construir una piscina en el jardín o el patio, conviene tomar la decisión ya. La demanda de este tipo de instalaciones se adelanta cada vez más, de modo que si queremos disfrutarla en verano hay que solicitar presupuestos cuanto antes.