«El lugar de nacimiento es fruto del azar», reflexiona el premio nobel de Literatura francés Jean-Marie Gustave Le Clézio, y por esa razón admite no haber tenido nunca la sensación de arraigo, aunque sí se identifica «con quienes marchan para huir».
«No me cabe ninguna duda de que su contribución a las culturas de Europa será una de las aportaciones más fructíferas de estos tiempos”, afirma Le Clézio en una entrevista sobre su última obra, «Canción de infancia» (Editorial Lumen), un canto al independentismo emocional y un relato sobrecogedor de los primeros años de su vida como niño de la guerra.