Las dos asociaciones existentes en las provincias de León y Lugo centradas en la ruta a Santiago de Compostela que documentó el monje alemán Hermann Küning von Vach con una guía escrita en su idioma en el tramo final de la Edad Media han decidido sumar esfuerzos para conseguir poner en valor y en el lugar que realmente se merece este trazado, todavía muy desconocido.
Künig fue un monje servita del convento de Vach (Vacha), en el actual estado alemán de Turingia, que decidió peregrinar en el siglo XV para visitar la tumba del apóstol Santiago y dejó escrita una guía de su largo viaje -más de 4.000 kilómetros- por territorios que actualmente corresponden a Suiza, Francia, España, Bélgica, Holanda y Alemania.
Con el objetivo de poner en valor el trazado descrito por el monje alemán desde hace años trabajan la Asociación de Amigos del Camino de Künig, con sede en León, y la Asociación de Municipios de Künig de Lugo, que presiden, respectivamente Tomás Álvarez y José Manuel Núñez.
Desde el pasado jueves, Álvarez, periodista y escritor, y Núñez, alcalde de As Nogais, han recorrido parte del trazado acompañados por el historiador Javier Gómez Vila, que está dirigiendo el estudio técnico para oficializar el trayecto lucense de Künig y que también preside una asociación denominada ‘Vía Künig’, y se han entrevistado con el regidores del los municipios por los que discurre para estudiar fórmulas que permitan poner en valor esta ruta.
El viaje se inició el pasado jueves en Trobajo del Camino, en el municipio leonés de San Andrés del Rabanedo, desde los restos del gran crucero gótico que cita Künig, ante el que se dividía la senda jacobea en dos direcciones.
La ruta de la izquierda conducía hacia Astorga y Foncebadón, por Fresno, Villar de Mararife y Hospital de Órbigo, y la de la derecha, el Camino de Santa Marina, llevaba a La Cepeda para alcanzar la entrada al Bierzo sin subir montañas, el paso entre Brañuelas y Cerezal de Tremor.
En ese municipio leonés mantuvieron una reunión con la alcaldesa, Camino Cabañas, para trasladarle la posibilidad de que potenciar el papel del municipio en relación a la peregrinación.
En este sentido, los promotores de la iniciativa propusieron una puesta en valor del crucero que en la Edad Media marcaba las dos vías peregrinas, tal como escribió Künig en su guía jacobea, considerada la primera guía moderna del Camino de Santiago.
Entre las posibilidades apuntadas se citó la de dedicar un espacio del edificio Araú, centro industrial surgido en el siglo XIX y recuperado en los últimos años para su uso cultural, a Künig y a los territorios recorridos por el monje.
El alcalde de Santa Marina del Rey (León), Francisco Álvarez, también presente en la reunión propuso a la alcaldesa la incorporación del municipio a la Asociación de Municipios del Camino de Künig por León, en tanto que el representante lucense ofreció también su colaboración para los proyectos relativos a al centro cultural del edificio Araú.
Seguidamente, los presidentes de ambas asociaciones recorrieron otros municipios que cita la guía de Küning y cerraron la jornada en Brañuelas.
Álvarez ha destacado a Efe que los contactos mantenidos han sido «históricos» porque se han puesto en una estrecha relación los proyectos de promoción de la vía de Künig en Lugo y de León.
«Lo más importante es que los responsables de los mismos se ha propuesto colaborar conjuntamente en la defensa de estas variantes del Camino Francés por las que pasaron los viajeros desde la Edad Media, y por donde siguen pasando en nuestros días», ha agregado.
Por su parte, Gómez Villa ha insistido en que el objetivo de todos estas asociaciones es recuperar esta ruta y ha valorado que estos contactos han permitido acercar posturas encaminadas a ofrecer una imagen conjunta.
De esta forma, ha incidido en que se ha acordado estudiar la utilización de la misma señalización del camino, el mismo logo y nombre, entre otros aspectos, con el objetivo de ofrecer «una imagen fuerte y unificada del camino del monje en la península».
Acorde con este objetivo, ambas formaciones apoyan la propuesta de crear en San Andrés del Rabanedo un centro Hermann Künig que revalorice su importante figura como redactor de las primera guía del Camino de Santiago.
La guía es sintética y rimada y se cree que la redactó así para que los usuarios pudieran memorizarla ya que surgió en los tiempos en los que acababa de ver la luz la imprenta, y hasta entonces era muy habitual la memorización de los textos.
La guía de Künig es esencialmente para los viajeros de la Europa Central, porque el monje alemán relata en la ida a Compostela un camino entre Einsiedeln y Santiago y en el retorno el que une Santiago con Aquisgrán.
Dos son los itinerarios claves: el primero, el de Einsiedeln, recoge el flujo peregrino de parte de Suiza, Bohemia, Baviera, Suabia, Silesia, Austria, Hungría y sur de Polonia; y el de Aquisgrán/Colonia, que corresponde a la peregrinación procedente de la costa del Báltico y Escandinavia, la del norte de Alemania y la que llegaba desde Polonia por Leipzig, Erfurt y Eisenach.