Feliz de regresar a los escenarios sobre los que lleva 25 años, Pastora Soler llega a Madrid este domingo para dar el pistoletazo de salida a una gira «íntima» que recibe su mismo nombre, en un momento donde hay «que desnudarse un poco más por las circunstancias» y levantar los escudos.
«Cuando echo la vista atrás veo un camino tortuoso, no fácil, con muchas oportunidades», cuenta al repasar su carrera musical en una entrevista en el Teatro Real, espacio desde el que arrancará el 9 de mayo su nueva gira, al igual que hizo en 2017 tras su parón de dos años, del que volvió con «muchísimo nervio».