Un menú que cuenta con una serie de entrantes a compartir, un principal a elegir, dulce y bebida y con el que empezar el fin de semana redondo.
Además, incluye algunos de los platos más emblemáticos de Leña, siendo una opción perfecta de desayuno tardío o comida temprana que llegó hace unos años para quedarse y que es hoy un formato consolidado que vive su máximo esplendor. Y no es para menos, con propuestas como esta: para compartir, se encuentran su reconocido aguacate de Málaga a la brasa, que se sirve acompañado de pesto de cilantro joven y salpicón vegetal con queso feta. Tampoco falta el foie para untar y ajetes aliñados, un llamativo bocado que emula ser una manzana; y el pretzel de ternera ahumada lentamente con salsa tártara, pepinillo y cebolla encurtida, que pone fin a esta primera parte del brunch.
El festín matutino de Leña continúa con los principales, uno a elegir, donde se pueden degustar distintas versiones de platos típicos del ritual del brunch, pero versionados con el toque inconfundible del chef Dani García, entre los que están la croque monsieur de mortadela trufada de cerdo ibérico y queso Havarti, unos huevos benedictinos de coppa de vaca vieja y un croissant relleno de helado de mantequilla, tofe de caramelo salado y avellanas.
Los amantes de los clásicos del chef podrán elegir la Burger. Por último, el dulce, con su emblemática tarta di rose de la mia mamma, que se sirve con helado de mantequilla tostada y de la que tan solo se elaboran 50 unidades al día, y una crema inglesa con vainilla. Servido con agua, zumo de naranja, zumo detox y café o infusión, el nuevo brunch de Leña llega para revolucionar los fines de semana de Madrid y estará disponible en el restaurante los sábados y domingos de 11:00 a 12:30h con un precio de 45 euros por persona.
