Recuperar recetarios tradicionales de aprovechamiento, no por necesidad económica sino por el planeta, es lo que plantea la «retrogastronomía», un movimiento al que cada vez se suman más cocineros y que quiere llegar también a los hogares para no esquilmar los recursos naturales, especialmente los marinos.
El presidente de Restaurantes Sostenibles, Sergio Gil, ha destacado este jueves en el encuentro telemático «Gastronomía y pesca sostenible», promovido por Marine Stewardship Council, que «el pasado es un caladero para la gastronomía; no se trata de inventar nada nuevo, sino de volver a la economía circular de antaño frente a la lineal actual».