Samuel L. Jackson, celebrado como uno de los actores más taquilleros de la historia del cine, fue el protagonista de los Óscar honoríficos, que la Academia de Hollywood entregó dos días antes de la 94 edición de sus galardones más famosos.
Conocidos como los Premios de los Gobernadores (Governor Awards), la ceremonia fue un evento pequeño e íntimo en el que también se rindió homenaje a la actriz noruega Liv Ullmann, musa de Ingmar Bergman; y a la cineasta Elaine May, una de las primeras mujeres que dirigió películas de gran presupuesto en Hollywood.