El siglo XX fue una época de avances para la humanidad en muchos campos. Pero también fue uno de los más dramáticos y duros. Sin duda, uno de los episodios más negros de nuestra historia fue el señalamiento y la persecución de personas inocentes por ser, pensar o actuar diferente. Uno de los más conocidos es el Holocausto contra el pueblo hebreo en el que en una ola de espiral, fanatismo y violencia millones de seres humanos fueron exterminados.
Como recuerdo de aquellos terribles sucesos, se han erigido en muchas ciudades monumentos, museos y memoriales. Su objetivo: ayudarnos a recordar para que nunca más vuelva a pasar. Y uno de los más recientes es la sinagoga diseñada por Manuel Herz Architects.
Este estudio suizo ha creado una sinagoga emergente en Babyn Yar (Ucrania) para conmemorar el 80 aniversario de una masacre que tuvo lugar durante el Holocausto. Llamado Sinagoga Babyn Yar, el lugar de culto consta de dos grandes paredes que se pueden abrir y cerrar manualmente como un libro emergente.
La sinagoga se construyó cerca de Kiev en el lugar de la masacre de Babyn Yar, donde los ocupantes nazis acabaron con la vidad de miles de persona durante dos días en 1941, una de las matanzas masivas de mayor evergadura durante el Holocausto.
“Es el lugar de una de las peores masacres del régimen nazi, cuando el 29 y 30 de septiembre de 1941 aproximadamente 35.000 judíos fueron asesinados a tiros por las tropas alemanas. Durante las siguientes semanas y meses, otros 100.000 judíos, prisioneros de guerra soviéticos, comunistas, nacionalistas ucranianos, romaníes y pacientes de un hospital psiquiátrico cercano fueron asesinados dentro de los terrenos de Babyn Yar”, remarcan en su pagina web.
Sin embargo, a pesar de los terribles sucesos que conmemora, nunca quiso crear un monumento sombrío, sino, todo lo contrario, quería que fuese un homenaje a la vida. Por eso, en lugar de crear un edificio monumental, Herz diseñó una estructura que tiene movimiento y se inspiró tanto por iglesias históricas de madera en Ucrania como por libros emergentes.
“Si conceptualizamos la sinagoga como una tipología de edificación en su más pura esencia, podemos considerarla como un libro. Durante el servicio religioso, una congregación se reúne para leer colectivamente un libro: el Sidur (el libro de oraciones) o la Biblia. La lectura compartida del libro abre un mundo de sabiduría, moral, historia y anécdotas a la congregación. Es esta noción la que inspira el diseño de la nueva Sinagoga Babyn Yar”.
El edificio consta de un par de muros de 11 metros de alto y ocho metros de ancho que fueron construidos con acero y revestidos de roble. Una de las paredes está colocada sobre una pista para que pueda moverse con un cabrestante manual. Cuando se pliegan, las dos paredes se colocan juntas, pero cuando se despliegan se crea una sinagoga tridimensional con un techo que se abre y un balcón.
La sinagoga se encuentra sobre una plataforma de madera y tiene paredes decoradas con oraciones y bendiciones. Su techo está pintado con la constelación de estrellas que habría sido visible sobre Kiev, en la fecha de la masacre en 1941 junto con símbolos e iconografía que hacen referencia a los interiores de las sinagogas históricas de Ucrania de los siglos XVII y XVIII.
La Sinagoga Babyn Yar es el primero de varios edificios que están planeados para conmemorar la masacre de Babyn Yar en el sitio, con un museo para conmemorar el Holocausto, un monumento que representa los nombres de las víctimas y un centro espiritual.